Primero vamos a aclarar qué implica la noción de niño interior, niño interior herido y la importancia de detenerse a mirar nuestra infancia con la finalidad de sanar y crecer como adultos responsables. Luego, te compartiremos algunas claves para comenzar el proceso para sanar este aspecto crucial en la vida de cualquier mujer u hombre exitoso.
¿Qué se entiende por Niño Interior?
Se entiende por niño interior el conjunto de cualidades de tu esencia interior asociadas a la pureza, espontaneidad, inocencia, fragilidad, amor incondicional, alegría, entusiasmo, vitalidad, creatividad, valentía, que experimentamos durante la infancia. Se refiere a esas diferentes etapas en la que fueron satisfechas las necesidades emocionales, se reforzaron las características positivas de tu personalidad y tu seguridad.
Al final termina siendo la imagen interna que tienes de ti misma (o). ¿Ahora entiendes porque sanar al niño interno te conduce al éxito?
Probablemente te cuestiones todo lo que he dicho hasta este momento y pienses eso es ideal pero no es mi caso. Te pido por favor respira de forma consciente y continúa leyendo.
Te en cuenta que todos, incluyendo las personas más exitosas del mundo, has experimentado en la adultez algún dolor de la infancia, la pregunta es ¿qué hicieron con eso?
La respuesta es Ser cada día más consciente, sanar lo que sea necesario que te conduzca a disfrutar de la vida presente y a avanzar en tu camino hacia el éxito, resignificando tu historia pasada.
Descubramos juntos ¿Qué significa el niño interno herido?
¿Qué se entiende por Niño Interno Herido?
En contraposición a la noción de niño interno, son todas aquellas heridas, inseguridades, insatisfacción, momentos de dolor, sensación de abandono, emociones y conductas negativas o desfavorables que se anclaron en la infancia, que influyen en tu presente, evitan que disfrutes la vida, de relaciones saludable e incluso del éxito.
En otra entrega estaremos conversando acerca de las heridas de la infancia. Sin embargo, me parece importante que conozcas las tres distintas maneras en las que una herida de la infancia se activa.
- Le afecta la actitud o el comportamiento que alguien tiene con ella o el.
- Se siente culpable tiene miedo de herir a alguien o de activar una de sus heridas con lo que dice o hace o con lo que planea decir o hacer.
- Sufre por lo que te haces o por cómo eres contigo mismo.
Lise Bourbeau plantea en su libro “La Sanación de las 5 Heridas”, la relación entre el tipo de herida y algunos ámbitos de la vida. En este sentido, plantea que en el área laboral es donde se sufre más el rechazo y la injusticia. En el ámbito personal es donde más se sufre el abandono y la traición y la humillación se vive en el área intrapersonal, es decir con nosotros mismos.
Ahora bien, ¿Por qué resulta tan importante detenerse a mirar a nuestro niño interior, si ya tengo 25, 30 o 40 años?
Porque determina lo que creemos acerca de nosotros, de los otros y del mundo, veamos esto con mayor detenimiento.
¿Por qué es tan importante sanar a nuestro niño interior?ñade aquí tu texto de cabecera
En algún momento de la vida, puedes sentir que tu pasado interfiere en tu desarrollo personal, profesional o empresarial, que te cuesta aceptar a tus padres tal y como son, que algo te impide disfrutar la vida a plenitud, que tus creencias activan conductas poco o nada expansiva para tu crecimiento. Es allí cuando resulta importante detenerse a mirar la niña o el niño interno que mora en ti.
En principio las heridas del niño interno afloran en cualquier ámbito de nuestra vida, en el personal, profesional e incluso en nuestros emprendimientos.
Hemos preparado una lista de 11 beneficios de sanar a tu niño interior.
- Fortaleces tu autoconocimiento.
- Te aceptas tal y cómo eres.
- Fortaleces tu autoconfianza.
- Evitas las dependencias emocionales.
- Transformas sentimientos dolorosos en fuente de aprendizaje.
- Evitas atraer parejas “tóxicas” o relaciones marcadas por la traición.
- Te comprometes a iniciar y concluir tus metas y proyectos.
- Te desprendes de la necesidad de control y perfección.
- Gestionas los estados emocionales dolorosos.
- Te despides del sentimiento “tóxico” de la culpa.
- Abandonas la necesidad de que otros te proporcionen cuidado, atención, felicidad y paz.
Con este panorama más claro podemos entonces abordar las claves que le permiten a una persona comenzar a sanar a su niño interior. Vale la pena resaltar que esto es un proceso, un paso a paso, que implica tiempo, profundizar en tu autoconocimiento, autoconsciencia e identificar no sólo en qué momento aparece una herida de tu niño interior, sino bajo qué circunstancias.
Paso a paso para Iniciar el proceso
“Mientras no nos hagamos responsables de nuestros problemas, volverán con más y más fuerza y con formas diferentes” (“La sanación de las 5 heridas Lise Bourbeau”)
Te invitamos a concentrarte y tomar nota de estas claves para que inicies tu proceso de sanar a tu niño interior y avanzar en tu camino al éxito, con buen pie.
Paso 1 Reconoce quién tiene el control.
Cuando se juzga o acusa a alguien, cuándo se piensa más en el pasado o en el futuro y sientes malestar, miedo, preocupación, culpa, celos, reproche, indecisión, duda e ira has cedido tu poder del autocontrol. ¡Es hora de recuperarlo!
Paso 2 Autoconciencia emocional.
Una de las formas de recuperar tu autocontrol es través de la autoconsciencia emocional, entendida como una habilidad que te permite reconocer, aceptar y gestionar tus emociones para el logro de un objetivo, que puede ser personal, profesional o empresarial.
La autoconciencia se logra entre otros aspectos, ampliando la gama emocional. Según las investigaciones en neurociencia ponerle nombre a una emoción disminuye considerablemente sus efectos.
No es igual, sentir aburrimiento, aflicción, agobio, agotamiento, desconfianza, inquietud, insensibilidad, irritación a sentirse alegre entusiasta, motivado, inspirado, por enumerar algunas. Son emociones y sensaciones que se expresan, se experimentan e incluso en el cuerpo de formas totalmente diferentes.
Cuando podemos ponerle nombre a una emoción y saber qué es lo que está sucediendo a nuestro interior es mucho más fácil gestionarlo
Te invitamos a responder estas preguntas ¿Qué siento en esta situación? ¿A qué le tengo miedo? ¿Qué me atemoriza de esta situación? ¿Puede ser que tenga miedo de…?
Paso 3 Identifica a quién van dirigidos tus juicios, reproches y/o reacciones.
Cuando tienes claridad a quién va dirigido tus juicios, reproches y/o reacciones puedes identificar con mayor rapidez qué herida está activa.
Por ejemplo, reprocharte con rabia a ti misma o a una persona de tu mismo sexo, probablemente se está manifestando la herida de injusticia. Si, por el contrario, el enojo o la rabia se dirige a una persona del sexo opuesto, muy probablemente esté operando la herida de la traición.
Hacerse responsable es crecer, admitir que nadie está en tu vida para cumplir tus expectativas ¡Nadie te debe nada! Pero tampoco tú le debes a nadie. Sin embargo, esta es tu decisión.
En el ámbito personal-familiar, hacerse responsable implica desprenderse del amor idealizado hacia los padres, donde se suponen son superhéroes capaces de resolverlo todo, ser omnipresentes, es dejar de reprochar cómo lo hicieron, y aceptar que lo hicieron lo mejor que pudieron ¡te dieron la vida!
En el ámbito personal-pareja, hacerse responsable significa quitar el peso sobre la pareja de que llenen vacíos emocionales o proporcionen “cuidados” que son tu responsabilidad. Recuerda una relación de pareja es una unión equilibrada, de una mujer con un 100% (que no espera que la complementen) y un hombre con un 100% libre de patrones, complejos, ni necesidad de reafirmación de su género.
En el ámbito personal-profesional, hacerse responsable significa aceptar que nada es personal, que siempre hay oportunidades de mejoras, aceptar y reconocer que cuentas con una serie de habilidades que están disponibles para tu crecimiento y el crecimiento de los que están a tu alrededor.
Tomando estas decisiones es que tienes la certeza que has evolucionado y cada vez estás más cerca de disfrutar una vida llena de éxitos.
Paso 5 Mira tú espejo y activa la empatía
Este paso para sanar tu niño interior está relacionado con el anterior, todo en la vida es significado y el resultado de la forma en qué pensamos, sentimos y actuamos.
No podemos cambiar las circunstancias, lo que podemos verdaderamente transformar es cómo las percibimos, lo que es afuera es adentro. Así que cuando en el transcurso del día en diferentes circunstancias o espacios aparecen personas de las qué te quejas, atacas, criticas, haces comentarios constructivos o no, juzgas, por alguna razón, un poco de eso está en ti.
Esos comportamientos, comentarios que te “detonan” de las personas a tu alrededor es un espejo de tu interior, aquello que juzgas está en ti y no aún no lo has podido identificar y resolver.
La invitación es que tomes un momento, respires de forma consciente, calmes tu ego y te preguntes ¿Qué de lo que me molesta o enoja del otro, está en mí? ¿Cómo puedo entender y respetar las emociones de los otros?
A partir de ese reconocimiento continua tu proceso. Recuerda que esto es muy personal.
Paso 5 Bondad contigo
Esto pasa por disminuir la intensidad y la frecuencia con que te juzgas y criticas cuando cometes una equivocación, cuando a pesar de tus esfuerzos no logras lo que te propones y cuando evitas o te niegas a reconocer tus pequeñas victorias.
Bondad contigo es aceptar qué eres un ser humano en constante evolución, que no tienes que ser perfecto y aun así eres valioso. Que actuamos con el nivel de conciencia que tenemos en un momento determinado, con lo que los miedos y expectativas nos permiten hacer.
Es vivir cada día con la certeza de construir nuestra mejor versión.
He tenido en el coaching muchas personas que al comenzar el proceso de sanar a su niño interno herido aflora no sólo el recuerdo, sino el dolor y las lágrimas por situaciones, palabras y actitudes que experimentaron en su infancia.
Al final estas conductas lastiman y anulan las habilidades, destrezas no sólo nuestras, sino de nuestros hijos, termina afectando su autoestima y fundamentalmente su autoconfianza.
Consciencia mis amores, como hijos (hacernos responsables) como padres (hacernos responsables) y fomentar la mejor versión de nosotros y de ellos (los hijos)
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Recibe un fuerte abrazo,
Tu coach Lilian Aya Ramírez
Terapeuta Sistémica y Consteladora Familiar con más de una década de experiencia.